fb-pixel

Compartir

La tumba de las luciérnagas

#Cine

La desgarradora historia real de ‘La tumba de las luciérnagas’

Estrenada en 1988, La tumba de las luciérnagas narra la desgarradora historia de dos hermanos que se quedan huérfanos durante la Segunda Guerra Mundial.

Conocido por películas como Spirited Away y Howl’s Moving Castle, Studio Ghibli se ha ganado el corazón del público con sus diseños de personajes únicos y sus historias cautivadoras. Si bien Studio Ghibli es célebre por crear películas llenas de color y fantasía, hay una que se desvía totalmente de esta norma: hablamos de La tumba de las luciérnagas, de Isao Takahata.

Estrenada en 1988, La tumba de las luciérnagas narra la desgarradora historia de dos hermanos que se quedan huérfanos durante la Segunda Guerra Mundial. No es exagerado afirmar que esta cinta es una de las más tristes en la historia del cine. Tan sólo hay que repasar el comienzo de la producción para darnos cuenta de ello.

Al principio de la película, vemos a un niño agonizando en una estación de tren mientras perece por la desnutrición. Tras su muerte, se reencuentra con el espíritu de su hermana pequeña y juntos vuelven a rememorar los sucesos que les llevaron a la muerte.

Aunque este trágico comienzo hace que parezca que el público recibe un spoiler importante, en realidad es una manera de hacernos sentir para alivio ante el dolor que veremos a continuación. Al conocer el destino de los personajes, el público se libera de la expectativa de un giro argumental.

La historia real de La tumba de las luciérnagas

Mientras que muchas películas de Ghibli son versiones de cuentos de hadas occidentales, esta conmovedora película es una adaptación de un relato corto semiautobiográfico de Akiyuki Nosaka, basado en sus experiencias personales durante el bombardeo de Kobe en 1945.

Tras sufrir la pérdida de muchos miembros de su familia durante la guerra, en especial su hermana de dos años, Keiko, Nosaka recurrió a la escritura como mecanismo de superación de dolor. Nosaka sentía una intensa culpa por haber sobrevivido mientras ella fallecía. Es por ello que el autor escribió una “versión idealizada” de los hechos, retratando al hermano mayor como cariñoso y amable con su hermana pequeña.

Este relato salió en forma de libro en octubre de 1967, y de inmediato Nosaka recibió numerosas ofertas para adaptar su novela al cine. Sin embargo, el autor se opuso porque creía que sería imposible recrear la devastación retratada en su libro.

La tumba de las luciérnagas: la película más triste y brutal de Studio Ghibli

Además pensaba que ningún niño podría interpretar al protagonista de forma convincente. Por eso, cuando Studio Ghibli le propuso una adaptación animada, quedó intrigado. Tras ver los storyboards de la película de Isao Takahata, Nosaka llegó a la conclusión de que éste era el único medio para llevar su historia a la pantalla.

La interpretación del libro por parte de Isao Takahata es lo que hace que esta adaptación sea tan cruda. Takahata se centra en las consecuencias de la guerra, y las vidas inocentes afectadas por ella, en lugar de centrarse en el conflicto directo de La tumba de las luciérnagas.

Sus propias experiencias como niño durante la guerra influyeron en su representación de la sociedad de la época. Por otro lado, su enfoque innovador y experimental de la narración hace de La tumba de las luciérnagas la película más triste y brutal de Studio Ghibli.

Aunque hay grandes películas de fantasía animada, La tumba de las luciérnagas sirve como prueba de que la animación puede trascender el mero entretenimiento. Es capaz de cautivar al público mediante una trama profundamente impactante, a la vez que tiene una animación sobresaliente.

La tumba de las luciérnagas es una experiencia que invita a la reflexión, no sólo por los hechos reales que describe, sino también porque desafía las expectativas de lo que se supone que debe ser una película de animación.

POR RODRIGO AYALA

Editor especializado en cultura pop, cine, historia, literatura y música. Amo el terror, la música rock, los conciertos y el running. Escribí los libros “Siempre al anochecer y otros cuentos de lo extraño” y “Potwór” para exorcizar mis demonios. Mi frase favorita: “It can't rain all the time”.

rodrigo.ayala@editorialtelevisa.com.mx
0
    Carrito de compra
    Tu carrito esta vacioRegresar