La mesita del comedor es una cinta de horror en toda regla. No hay monstruos, demonios o muertos vivientes en ella. Solo un secreto inconfesable y angustiante que su protagonista lucha por guardar en todo momento.
La mesita del comedor.
Quizá este título no te suena a una película de terror o de suspenso. Sin embargo, te puedo asegurar que es una de las más cardiacas, y aterradoras, que verás en mucho tiempo. Después de leer decenas de reseñas que elogiaban su capacidad de transmitir miedo y ansiedad en todo momento, estaba cada vez más ansioso por conocerla. Y después de (¡por fin!) verla, puedo afirmar que las reseñas se quedaban cortas.
La mesita del comedor es una cinta de horror en toda regla. No hay monstruos, demonios o muertos vivientes en ella. Solo un secreto inconfesable y angustiante que su protagonista lucha por guardar en todo momento. Y es eso lo que provoca angustia en el espectador, que se vuelve cómplice de lo ocurrido.
Lo que comienza como una cinta que expone a un matrimonio en crisis, se desenvuelve paso a paso como una historia cruel y retorcida, pero fascinante. No hay manera de quitar los ojos de encima y ese es el propósito de toda película de suspenso: que el espectador no tenga deseos ni de parpadear para no perderse de nada.
¿Pero de qué trata La mesita del comedor, película del español Caye Casas?
Bien, todo comienza con un matrimonio de mediana edad que se encuentra en una mueblería. Jesús, interpretado por el actor David Pareja, está ahí para comprar una mesita para su casa. Sin embargo, su esposa, Maria (Estefanía de los Santos), se opone a ello aunque termina cediendo para darle un pequeño placer a su marido.
No pasan por el mejor momento como pareja y eso se nota en la tensa relación entre ambos. Lo que Jesús y María ignoran es que la mesita se convertirá en el origen de la peor de sus pesadillas. Y aquí es donde la cinta destaca por la sencillez y originalidad de su propuesta: un objeto insignificante como una maldita mesa es el eje sobre el que gira la tragedia de sus vidas, que involucra a su bebé recién nacido.
Caye Casas es un maestro para generar tensión. La mesita del comedor no es una cinta extensa, tiene el tiempo necesario para tejer una trama que se desarrolla casi en su totalidad en un mismo escenario: la casa del matrimonio.
En este escenario cotidiano se desata una historia que mantiene al espectador lleno de nervios, tensión y estrés por saber cómo y cuándo se resolverá el conflicto de la trama y, sobre todo, cómo hará Jesús para confesar a su esposa el aterrador secreto que guarda.
Además de ello, la cinta está aderezada de un humor en extremo cruel y negro que dosifica la tensión que experimentamos. Sin embargo, pasado el momento de risas, continuamos a la expectativa de lo que está por suceder.
A destacar las magníficas actuaciones de David Pareja y Estefanía de los Santos. Su química en la pantalla es extraordinaria. El primero nos lleva a sentir los nervios de una manera muy vivida, mientras que la segunda tiene un carisma imponente con ese papel de mujer dura, pero que ignora la verdad tras sus espaldas.
Si tienes ganas de ver una cinta que hace eficiente el tiempo y lo aprovecha a su favor, no debes perderte esta cinta española que se pudo ver en México en el Festival Macabro 2023. A partir del 12 de enero se podrá ver en un mayor número de salas.
Advertencia: si eres una persona muy nerviosa y no soportas la tensión en su máxima expresión, mejor no veas La mesita del comedor. Puedes quedar afectado de por vida. No es una cinta para nerviosos. Es una joya.
