Lee el final explicado de ‘El planeta de los simios’, película de 1968 recordada por su dramático y aterrador desenlace.
El impactante final de la primera película de la saga El planeta de los simios, dirigida por Franklin J. Schaffner, sigue siendo uno de los más memorables de todos los tiempos. Al miso tiempo, el clásico de 1968 dejó a los espectadores con muchas preguntas. Basada en la novela de Pierre Boulle, la historia imaginaba un planeta en el que los simios se convertían en la especie dominante y los humanos eran sometidos.
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La película protagonizada por Charlton Heston, Roddy McDowell, Kim Hunter, Maurice Evans, James Whitmore, James Daly y Linda Harrison no se basaba únicamente en las ideas clásicas de la ciencia ficción, sino que también mezclaba elementos de misterio, acción y terror, dando a la adaptación un tono único que ayudó a diferenciarla de la avalancha de ciencia ficción de finales de los 60.
En el presente, la saga se ha ampliado con varias películas que demuestran que la franquicia sigue llamando la atención de los espectadores de manera poderosa.
Final explicado de El planeta de los simios
George Taylor (Charlton Heston) forma parte de la tripulación de una nave espacial que viaja en una misión de larga duración. Para su desgracia, la nave se estrella en un planeta desconocido, en el año 3978, que carece aparentemente de vida inteligente.
Sin embargo, Taylor se encuentra con una raza de simios muy desarrollados que se comunican por medio de un lenguaje inteligente y poseen tecnología avanzada. Para su sorpresa, los simios tienen sometidos a seres humanos que son incapaces de comunicarse. Cuando su líder, el doctor Zaius, descubre que Taylor posee el don de la palabra, decide eliminarlo.
¿Qué pasó al final de El planeta de los simios?
Tras entablar amistad con los científicos Cornelius y Zira, Taylor es liberado de su cautiverio por los primates. Junto con ellos y su compañera de cautiverio, Nova, el grupo huye a la Zona Prohibida. Allí, Taylor es testigo de artefactos humanos que demuestran que el hombre fue una vez la raza dominante del planeta.
Entonces llega el Dr. Zaius y revela que siempre ha sabido de los artefactos humanos. Zaius permite a Taylor y Nova explorar la Zona Prohibida, pero les advierte de que pueden encontrar información nada placentera.
El Dr. Zaius se lleva a Zira y a Cornelius para juzgarlos por herejía, mientras que Nova y Taylor comienzan a explorar el yermo en busca de respuestas. La pareja humana se encuentra vagando por la costa cuando de pronto se encuentra con una destruida Estatua de la Libertad.
Taylor se da cuenta entonces de que ha estado en la Tierra todo el tiempo, pero en el futuro, después de que el ser humano destruyó la civilización y llevó a los simios a asumir el control de la misma.
La guerra nuclear y otros mensajes sociopolíticos
Tan pronto como Taylor piensa que ha superado su terrible prueba se da cuenta de que básicamente ha vuelto al punto de partida.
En este punto, Taylor se da cuenta de las advertencias del Dr. Zaius (Maurice Evans) de lo que podría encontrar más allá de las baratijas de origen humano en la cueva. Taylor grita con rabia: “¡Maniacos! ¡La destruyeron! ¡Malditos sean! ¡Malditos sean!”.
El Dr. Zaius conocía la existencia de una civilización humana anterior a la suya, pero sabía que a veces es mejor no revelar la verdad. Cuando se produjo el icónico final, era obvio que Taylor estaba disgustado por la raza humana que, literalmente, se destruyó a sí misma.
Lo que ocurrió en la Tierra fue una guerra nuclear, y el mensaje que se desprende de este hecho es relevante para lo que ocurría en la sociedad de los años sesenta. Hay muchos mensajes políticos que se transmiten a lo largo de El planeta de los simios, pero sin duda el más poderoso es el de la escena final.
Es curioso saber que este final fue escrito para la película, ya que no figura en la novela original de Pierre Boulle.