¿Dónde queda el último Blockbuster del mundo y cómo sobrevive?

Blockbuster abrió su primera tienda de alquiler de películas en Dallas (Texas) en 1985. A partir de ahí creó un imperio que duró hasta la llegada del streaming.

Bend, Oregon es la locación donde sobrevive una especie casi extinta: la marca Blockbuster, esa cadena de tiendas dedicada en el pasado a la renta de películas y juegos de video. La llegada del streaming hizo que las personas se quedaran en casa para elegir la siguiente película en lugar de ir a la tienda física por ella.

De esa manera, Blockbuster comenzó a caer en el olvido. Hoy es un concepto muerto que tiene una sola tienda en el mundo, justo la que se alza en Bend, Oregon. Pero ¿cómo es que la tienda sobrevive en una era donde Netflix y sus semejantes llevaron el consumo masivo de películas a experimentar un cambio radical?

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Los dueños del último Blockbuster decidieron, por tiempo limitado, rentar el espacio en Airbnb, por lo que la gente se puede hospedar en este emblemático lugar. Además del hospedaje también pueden disfrutar de todas las películas, videojuegos y series disponibles; también pueden comer las golosinas que se encuentren ahí.

El último Blockbuster del mundo hoy es un vestigio de lo que alguna vez fue ese gran imperio de renta de películas. Pero sobre todo es testigo de cómo las plataformas arrasaron lo que antes parecía invencible. La gente decidió que era más barato (y más cómodo) dar un clic desde casa para acceder a un universo de entretenimiento.

Blockbuster abrió su primera tienda de alquiler de películas en Dallas (Texas) en 1985. A partir de ahí creó un imperio que duró hasta que el streaming comenzó a crear un nuevo modelo de mercado que hoy domina la manera en que consumimos series y películas.

En 2010, Blockbuster se declaró en quiebra. Mientras cerraban locales en todo el mundo, el de Bend resistió y se convirtió en la última tienda de su especie que queda en funcionamiento. Hoy es una tienda de alquiler de vídeos en pleno funcionamiento que abre los siete días de la semana.

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Esta última tienda aún luce los grandes escaparates de cristal con anuncios vibrantes que anuncian los nuevos estrenos y una gran selección de películas. Tiene un buzón de devolución justo al lado de las puertas dobles, y el cartel amarillo que dice Blockbuster se aprecia en una marquesina gigante.

En la parte trasera de la tienda hay una sección dedicada a la historia de Blockbuster donde se puede ver memorabilia de películas. Hay carteles de películas a la venta, y una colección de objetos clave del cine, como la capa y la capucha de Robin Hood y la bata que Russell Crowe llevaba en Cinderella Man.

Nostalgia pura para los que alguna vez fuimos visitantes asiduos de este lugar en nuestra localidad.

¿Qué opinas? ¿Eras asiduo visitante de Blockbuster?